La palmera Bismarckia nobilis, es originaria de Madagascar, isla que cuenta con muchos endemismos botánicos, al separarse del continente Africano hace millones de años, y quedar aislada del resto del continente.
HÁBITAT: es originaria de zonas secas, aunque puede vivir en zonas de anegamientos puntuales. Prefiere habitar en lugares de clima subtropical seco, en donde se desarrolla sin dificultad. Resiste situaciones ventosas.
DESCRIPCIÓN: especie de porte majestuoso que atrae la atención allí donde esté situada. Es una especie con un solo tronco de más de 35 cm. de diámetro, de color grisáceo. Las hojas son costapalmadas, muy rígidas y pueden alcanzar hasta 1,5 metros de diámetro ; su color gris plateado las hace espectaculares y enormemente atractivas. Los peciolos presentan una pequeñas escamas de color marrón. Situada en lugares adecuados, esta palmera acostumbra a crecer con rapidez. Es una especie dioica, por lo que hay ejemplares femeninos y masculinos. Las flores son muy similares en los dos géneros. Los frutos son pequeños, esféricos y de color marrón oscuro. Hay que proporcionarle espacio a su alrededor para que pueda crecer y desarrollar su potencial ornamental. Es una de las palmeras originarias de Madagascar que más se cultivan.
CULTIVO: Suelo: no es exigente en la composición del suelo, pero requiere un buen drenaje.
Riego: los riegos no deben ser excesivos pero habrá que procurar que tenga agua a su disposición habitualmente.
Abonado: no precisa de abonados específicos, pero mantener el suelo con una adecuada cantidad de materia orgánica beneficia su desarrollo.
Poda: conviene eliminar únicamente las hojas secas y dejar que luzca su porte natural sin tocarlo.
Reproducción: es preciso eliminar la capa protectora de las semillas antes de la plantación, que ha de realizarse en contenedores profundos para que pueda desarrollar las largas raíces que emite. El periodo de germinación varía entre 1 y 2 meses.
Trasplante: es difícil de trasplantar, sobre todo si no posee un estípite bien desarrollado.