PHOENIX THEOPHRASTI.
La palmera datilera de Creta, es una palmera nativa del este del mediterráneo, con una distribución muy restringida, limitada al sur de Grécia, en pocos sitios en Creta y las islas cercanas, así como alfunos lugares de la costa Turca. En Europa, con Chamaerops humilis (la palmera que crece en España) son las palmeras autóctonas únicas en el territorio continental de Europa. En Turquía es la única especie de palmera nativa, aunque otras más comunes se introdujeron posteriormente. Aparte de que habitualmente no son comestibles y los racimos de frutos se encuentran en posición vertical, la especie de Creta puede parecer muy similar a la especie cultivada Phoenix dactylifera.
Phoenix theophrasti alcanza un tamaño de hasta 15m de altura, por lo general con varios tallos delgados. Las hojas son pinnadas, de 2-3 metros de largo, con numerosos foliolos lineales verde grisaceos rígidas de 15-50 cm de largo en cada lado del raquis central. Las hojas muertas se marchitan pero permanecen unidas al tallo durante mucho tiempo después de marchitarse. La fruta es una drupa de color marrón amarillenta ovalada de 1,5 cm de largo y 1 cm de diámetro y contiene una única gran semilla; la pulpa de la fruta es demasiado delgada y fibrosa para que sea de importancia agrícola y tiene un sabor acre, aunque los frutos se comen a veces por los lugareños. Resiste una temperatura min. de -8ºC en estado adulto.