Nuestra abuelas y el patio

Quién no recuerda ese patio precioso que tenia nuestra abuela.

Son muchas las casas de nuestros mayores que están llenas de plantas. Que bonito es pasear por esos pueblecitos del interior con sus calles muy estrellas, empinadas y con muchos escalones y  ver esos helechos, esas colocasias o apidistras, siempre tan bien cuidadas. 

Esos balcones llenos de gitanillas colgando o alguna planta más actual como son las surfinias. Toda esa belleza se las debemos a nuestra queridas abuelitas, donde un esqueje se lo pasan una a la otra y llegan a conseguir esas maravillosas plantas.

Es un placer para mi, estar como organizadora del concurso de corrales y balcones que organizamos conjuntamente con el  Ajuntament de Alginet.  Cuando entras en un corral o patio de una señora mayor observas en todas las casas las mismas variedades de plantas, esas variedades que te recuerdan a la casa de tus abuelos, y te cuentan, esta planta mira, de un esqueje muy pequeñito que me dio fulanita y esta de otro me lo dio sotanita… Y la ves con esa satisfacción de haber conseguido algo tan fantástico como crear un ser vivo y su desarrollo.

Otra cosa que te suelen contar las señoras mayores es que les hablan a las plantas, que les cantan, o que te cuenta toda la historia de su planta, muchas veces ligadas a su propia vida, y te maravillan con esas historias tan bonitas. Las suelen mover en función de las horas de sol o de sombra que necesita cada planta.106

Por no decir lo que se suelen emocionar cuando te cuentan, esta planta me la estimo muchisimo, era de mi madre, inclusive alguna te dice, pertenecía a mi abuela.

Las señoras mayores viven las plantas de una forma muy especial, nunca les oyes decir, se me mueren las plantas, al contrario te dicen, mira de este trocito he criado esta preciosa planta, a mi me llena de orgullo oírles contar como han podido hacer crecer esa planta, muchas veces con tierra de campo, sin casi abonos y sin nada químico, con una tierra muy dura y que la consiguen mantener si apretarse.

Que grandes jardineras, poco reconocidas, que son nuestras abuelas……