Begonia benariensis

Nombre científico: Begonia benariensis

Nombre común: Begonia Benariensis

Variedad: Begonias

Familia: Begoniaceae

Tamaño planta adulta: Puede alcanzar entre 30 y 50 cm de altura, con un crecimiento compacto y denso.

Floración: Produce abundantes flores durante todo el año en climas cálidos, y desde primavera hasta otoño en climas templados. Las flores pueden ser de varios colores, incluyendo rojo, rosa, blanco y naranja.

Iluminación: Prefiere luz indirecta brillante, aunque también puede tolerar algo de sombra. Evitar la luz solar directa, que puede quemar sus hojas.

Temperatura: Idealmente entre 18°C y 24°C. No tolera bien las temperaturas frías, por lo que debe protegerse del frío y las heladas.

Trasplante: Se recomienda trasplantar cada 1-2 años, preferiblemente en primavera. Utilizar un sustrato rico en materia orgánica y con buen drenaje.

Riego: Requiere riego regular, manteniendo el sustrato húmedo pero no encharcado. Evitar mojar las hojas para prevenir enfermedades fúngicas.

Abonado: Abonar cada 2-4 semanas durante la temporada de crecimiento con un fertilizante balanceado para plantas de flor. Reducir el abonado durante el invierno.

Podas: Podar las flores marchitas y las hojas dañadas para fomentar un crecimiento saludable y continuo. Se puede recortar ligeramente para mantener la forma deseada.

Plagas y Enfermedades: Puede ser susceptible a ataques de pulgones, ácaros y hongos en condiciones de humedad excesiva. Es recomendable monitorear la planta regularmente y tratar con productos específicos en caso de infestación.

Usos en Jardinería: La Begonia benariensis es ideal para borduras, macetas y jardineras, aportando color y vitalidad a cualquier espacio. Su capacidad de florecer abundantemente la convierte en una excelente elección para jardines y patios, así como para interiores bien iluminados.